Una segunda oportunidad

Amigos los invito a leer una página inspiradora del mundo del deporte

Una segunda oportunidad

Allí estaba la línea de meta y la cinta de ganador estaba intacta y a su alcance, entonces cerró los ojos, mientras se le escapaban un par de lágrimas, apretó los puños y aceleró el paso.

Él era la esperanza de su pueblo, todos tenían la mirada puesta en él, su talento para el deporte se había despertado desde niño, en la escuela, en el colegio y la universidad, campeón de largo aliento, en todas las competencias.

Y por su carácter era popular, simpático, conversador y capaz de cautivar con su sonrisa, era un ganador nato.

corredor

Y por su rendimiento y resultados tenía un cupo para las olimpiadas y por sus tiempos entraba en el grupo de los favoritos para el podio.

El deporte de fondo lo había llevado a conocer y competir en una gran cantidad de países y se había enfrentado a todo tipo de competidores, de manera que al competir en las olimpíadas cerraría con broche de oro su brillante carrera deportiva.

Aléjese de aquí…

Amigos los invito a disfrutar de una página del realismo mágico ecuatoriano y del Mundo de Simón.

 

Aléjese de aquí…

Aquella noche, tenía una sensación extraña, de angustia contenida, sabía que no era una pesadilla, pero la presencia de algo o alguien a las 12 de la noche y un par de minutos más, me había despertado, como si hubiese sido Simón, pero mi compañero canino ya no estaba, yo estaba despierto, sentado sobre mi cama, bañado en sudor y en el ambiente se sentía un aire pesado, inquietante.

Moví la cabeza de un lado a otro para tratar de espantar algo que pudo haber sido parte de una pesadilla, pero en ese momento se encendió la luz del patio que se activa con el sensor de movimientos.

Entonces ante la sospecha que alguien estaba al interior de mi casa me puso en alerta, mi piel erizada. mostraba mi estado de miedo y temor por la supuesta presencia de alguien extraño en casa.

Con sigilo y discreción busqué el “palo” con que a veces acompañaba mis caminatas salí al patio de la casa que estaba iluminado sin un motivo conocido, inquietante y atemorizador, mientras buscaba al supuesto intruso, de forma sorpresiva e inesperada, de manera que me dio un sacudón en mi corazón, se activó el seguro de la puerta peatonal de la casa, entonces un viento inusual y dirigido soplaba de manera que la puerta se abrió de golpe.

No sabía si regresar a la casa y esconderme debajo de la cama o seguir la dirección del viento; elegí de una forma atípica, lo habitual hubiese sido ir  a buen recaudo, pero esta vez me armé de valor o de curiosidad “mal sana” y así lo hice, salí a la calle, el viento tenía una dirección determinada, daba vuelta a la derecha de la puerta, luego a la izquierda y luego a la derecha hasta terminar en el redondel que limitaba al borde de la quebrada profunda, que marcaba el límite de la urbanización donde yo vivo.

No obstante, la obscuridad de la noche se podía mirar como en el borde que da al precipicio estaba parado un hombre, con su frente hacia la quebrada y parecía que se iba a lanzar hacia lo profundo del cañón.

Apenas lo pude distinguir y al intuir lo que me parecía iba a hacer le grité ¡Deténgase!

suicida

El hombre volteó su cabeza y respondió: Aléjese de aquí…

HISTORIA DE AMOR

Historia de amor

Historia Amor

El último acontecimiento fue doloroso y definitivo, sin embargo, la actitud y la posición de ella fue incuestionable.

Una tarde los esposos fueron al cine a ver una película cualquiera, la historia de amor de una pareja que al llegar el otoño de la vida y con el nido vacío, decidieron hacer el viaje de sus sueños y como en Hollywood los sueños se cumplen, la pareja pudo disfrutar de los placeres que dan los trayectos lejanos, desconocidos y repletos de aventuras.

Al salir de la función de cine y mientras llegaban al parque principal de la pequeña ciudad, el hombre, dijo mientras la miraba con ternura a su esposa:

- Rosita, hemos trabajado toda la vida, desde hace medio siglo, cuando le tome de la mano, era usted casi una niña y escapamos de la casa de sus padres.

Construimos nuestra vida juntos, iniciamos una familia, educamos a nuestros hijos, tenemos nuestra casa y hemos sido felices aquí, siempre aquí.

  • ¿Y si nos vamos de viaje?
  • No…, me da miedo,
  • ¿Sería cómo cuando iniciamos nuestra vida juntos?
  • Pero éramos jóvenes,
  • Recuerda que llegar hasta aquí viajamos por casi dos semanas.
  • Pero ahora me da miedo…, ¿a dónde iríamos?
  • No lo sé…, ¿A la plaza Garibaldi?, ¿A visitar a la Virgen de Guadalupe?, ¿A la casa de María Félix?

Los esposos, vivían solos, sus hijos tenían sus propios hogares… y tomados de la mano comenzaron a pensar, a soñar, aunque el miedo amenazaba con vencerlos.

Tomaron contacto con una amiga de uno de sus hijas que trabajaba en una agencia de viajes y con la promesa de guardar discreción respecto a sus planes, empezaron a planear su aventura, destino, costos, requisitos, formas de financiamiento.

  • No sabía que era tan complejo, tantas cosas, pasaporte, visa, fondos suficientes, seguro médico, pero bueno.
  • Con usted me siento tranquila susurró mientras le sonreía,
  • Cómo cuando nos escapamos hace tantos años.

La tercera edad tiene sus ventajas, rapidez en los trámites, descuentos, atención preferencial; solo nos hace falta el seguro de viaje y requerimos un certificado médico.

El rostro de él estaba desencajado:

  • Está seguro doctor, pero si no tengo ningún síntoma.
  • Sin embargo, el último examen específico es definitivo, usted tiene una enfermedad silenciosa y está en estado terminal.

Esta circunstancia cambió todo, la vida para él llegaba a su fin, no de la manera esperada, más lenta, quizá más natural, pero tenía una dolencia inexpresiva y final.

Como si de repente la curva de la vida se habría vuelto cuesta abajo, el hombre entró en una franca decadencia y ya con escenarios de dolor físico, pasaba junto a su Rosita, charlaban largas tardes, lo hacían con serenidad y no era extraño verlos sonreír mientras se tomaban de la mano.

Una tarde, él la miró y esbozó una débil sonrisa, dio un largo suspiro y se marchó.

Pasaron los días, quizá unos cuantos meses desde la muerte del hombre y a Rosita parecía que se le habían terminado las palabras, solo permanecía en silencio y con la mirada puesta a lo lejos. Una de sus hijas, intentaba animarla, sacarla de su estado de letargo y le mencionó de los planes de viaje que tenía con su compañero y que su amiga de la agencia de viajes le había contado a pesar de haberle pedido discreción.

  • Tienes los boletos comprados y se puede reprogramar el viaje y podrías hacerlo con la compañía que tú quieras le insinuó.

Rosita respondió de forma tranquila, pero incuestionable:

Hace muchísimos años, me fui con tu padre cuando yo era casi una niña y el viaje con el que habíamos soñado hace tan pocos días, ¡lo voy a hacer con él!

Y así fue, ella se apagó de forma rápida y tranquila, solo que antes de dejar escapar su último suspiro pronunció el nombre de su esposo, lo hizo con una sonrisa y se marchó.

 

Fin

Jorge Mora Varela

 

Imagen tomada de: Freepik

DEBIÓ HABER NACIDO 70 AÑOS DESPUÉS

Jorge Mora Varela presenta una página del realismo mágico carchense.

DEBIÓ HABER NACIDO 70 AÑOS DESPUÉS

Visto desde lejos, podría parecer extraño o una manera sutil de lo tétrico, pero es que en este pueblo era una actividad natural y frecuente.

Una tarde paseábamos con mi viejo amigo por las callejuelas y senderos del cementerio Azaél Franco de la Ciudad de Tulcán y mientras caminábamos con parsimonia resultaba curioso leer el año de nacimiento y de la muerte que estaban escritas en las lápidas.

Algunas databan del inicio y terminaban en los albores de del siglo XX, los nombres y apellidos de hombres y mujeres daban una idea de quienes habían construido su vida en esta fría empalizada al norte de la ecuatorianidad que testimoniaba un lazo estrecho con la colombianidad.

Depresion

Un nicho alto sin apenas el cuidado de nadie refería nombres y apellidos comunes y databa (1940-1957).

Mira le dije, la persona que está enterrada allí murió a los 17 años y mi amigo sin apenas alzar la voz dijo: Ese muchacho debió haber nacido 70 años después.

El cáliz más hermoso del mundo

Jorge Mora Varela, para la 1° FERIA VIRTUAL DEL LIBRO AREQUIPA 2024, narra: un relato del realismo mágico ecuatoriano EL CÁLIZ MÁS HERMOSO DEL MUNDO, en YouTube, en: 

https://youtu.be/H3s-j3WbZd