SI NO TE GUSTA, ES TU CULPA

Si tienes algún tipo de sensibilidad hacia temas sociales o religiosos, por favor NO lo leas.

 

¿Una nueva tendencia del marketing cinematográfico?

SI NO TE GUSTA, ES TU CULPA

Porque eres misógino, homófobo. machista, racista, fanático, odiador.

Me parece que estos genios del marketing cinematográfico sobre todo de tendencia “WOKE”, responsables de las producciones cinematográficas o televisivas realizadas dentro de la "woke culture", han apostado por la vieja estrategia usada por el cristianismo recalcitrante de la época más obscura de la religión oficial y que se creían dueños y señores de la única verdad, por esta razón eran intolerantes, pues se creían con la suficiente potestad para determinar lo que las personas debían pensar o creer y si NO lo hacían, entonces desde su supuesta superioridad moral podían y de hecho lo hacían “insultar a su audiencia”.

Como quizá lo hacía hasta mediados del siglo XX, el señor cura de cualquier pueblo, quien desde su púlpito se creía con la suficiente autoridad para tratar a la feligresía de forma despótica, irrefutable e incontrastable que les permitía señalarlos con el dedo como pecadores, infieles, herejes, indignos de llamarse hijos de dios o de alcanzar la salvación, hasta desarrollar una cultura culpógena, que nos condenaba a llevar sobre nuestros hombros un permanente sentimiento de culpa de actos o hechos ajenos o lejanos, reales o ficticios pero que sirven como mecanismos de control y de dominación de poblaciones gigantescas en manos de unos cuantos, (el pecado original, la crucifixión del Cristo, etcétera, etcétera).

Esta manifestación irrespetuosa y en apariencia original y genial de Si no te gusta, es tu culpa”, adoptada por los dueños de la oferta cinematográfica “WOKE” aparecida en la segunda década del siglo XXI, pretende “culpar a la audiencia” cuando su oferta NO es del agrado de los auditorios, en una inaceptable violación al derecho de los espectadores de manifestar su agrado o desagrado, la aceptación o el rechazo por cualquier producto en este caso audiovisual.

En lo particular, YO decido lo que quiero, lo que creo, lo que me agrada, lo que quiero ver, asistir o tener y nadie puede entrometerse en mis decisiones, peor aún, alguien que sin preguntarle y sin autoridad pretenda decirme la manera en la que se supondría yo debo pensar, para que se ajuste a lo que otros hayan determinado lo que en teoría es “políticamente correcto” o no, para mí.

Les he dado la espalda a los agresivos e intolerantes “pseudo representantes de la divinidad en la tierra”, no se diga a los generadores de contenido cinematográfico manipulador y cargado de una ideología política que no forma parte de mi estructura mental ni mí cosmovisión.

¡Faltaba más...!*

 

*rechazo de una proposición absurda

 

Jorge Mora Varela

 

 

Imagen tomada de: depositphotos.com