Ha llegado el tiempo cuando un día más de sol no es una buena noticia

Ha llegado el tiempo cuando un día más de sol no es una buena noticia

Ha llegado el tiempo cuando un día más de sol no es una buena noticia

Un día de sol era y es sinónimo de felicidad, pero cuando llevamos meses de sequía, “un día más de sol no es una buena noticia”.

Y no es la falta de energía eléctrica aquello que me quita el sueño, por que la generación eléctrica tiene alternativas de producción, no solo de las hidroeléctricas y de su irremediable dependencia de la lluvia, también la geotérmica, eólica, solar, nuclear y allí depende de la decisión política y de los fantasmas, complejos o ignorancia de las autoridades competentes.

Pero la falta de agua destinada al consumo humano, eso es fatal.

Cuando ha llegado el día en que un día más de sol no es una buena noticia porque las montañas nevadas que aparecen cada mañana al descubierto van perdiendo su capa nevada como advertencia de la falta de agua de los humedales que llevan el líquido vital a las ciudades, pueblos y poblados, eso me inquieta y de hecho me estremece.

Entonces, me pregunto ¿dónde están las gastadas propuestas que las he oído desde mi juventud (hace muchisisisisisisímos años), la reforestación, el cuidado de los páramos, o de entregarle estos tesoros naturales a las comunidades para que los cuiden?

El cuidado del agua, no puede ser un lema de campaña política, ni siquiera una política de estado, debe ser una forma de vida, una filosofía de vida, para disfrutar del placer de abrir la llave del grifo y que caiga agua.

Ya las autoridades anuncian los “posibles” racionamientos del servicio de agua potable y siguen los días de sol y la ausencia de nubes, entonces eso no es una buena noticia, aunque el presidente de la república anuncie el fin de los “apagones” o se acerquen las elecciones y tengamos a 15 farsantes que juran y perjuran que con ellos llegará el fin de escases eléctrica y de la generosa satisfacción de los caudales de agua.

Lo único que tengo claro es que “un día más de sol no es una buena noticia”, y eso no es un problema político, ni de falta de fe, ni de cadenas de oración, (así lo dirían los rezanderos), el planeta funciona así y frente a eso nada.

 

Jorge Mora Varela