LA TORTURA DE VIVIR LOS CORTES DE ENERGÍA ELÉCTRICA EN EL SIGLO XXI PARA LOS QUE NACIMOS EN EL SIGLO XX.
De hecho, no soy nativo digital y por esa razón desconozco por obvias razones, todos los artilugios que permite el desarrollo tecnológico en las tecnologías de la comunicación y claro me siento como “bobo” al ver a una gran cantidad de personas jóvenes, que parecen sortear sin mayor dificultad los avatares y las molestias de los cortes de energía eléctrica, tan presente en el Ecuador.
Mientras viajo en el metro, en un restaurante, en un centro comercial, en la calle, en el parque, los jóvenes parecen sortear las dificultades que al parecer solo son mías.
Para mi es una condición sine qua non (la provisión del servicio público de la “energía eléctrica” como condición o ingrediente necesario y esencial —de carácter obligatorio— para que el entramado social funcione de manera normal).
Sin embargo, me encantaría tener el conocimiento y las destrezas tecnológicas que parecen ser prerrogativa de los más jóvenes, para eludir, encontrar las salidas y hacer más llevadera la tortura de la “falta del fluido eléctrico”, que a mí me enferma, me enoja, me frustra y me enfurece.
Cargadores, UPSs, gadgets recargables, conexiones, datos y un larguísimo etcétera me han demostrado que he caído en el grupo de los neo analfabetos digitales.
Mientras tanto, alzo a ver al cielo a ver si llueve, caso contrario parece que estoy fuera del mundo, frustrado y enojado, al tiempo que maldigo al gobierno y a todos los gobernantes habidos y por haber, lo acuso de incompetencia y le exijo soluciones inmediatísimas, mientras otros parece que hacen el mundo, no solo están en él y no envejecerán de la manera horrible como lo hago yo.
Jorge Mora Varela
Imagen tomada de: josvim