Al hurgar el baúl de los recuerdos encontré esta joya escrita por una joven mujer al recordar un año de la muerte de su joven esposo.
Una hermosa manera con la cual mi madre Doña Norma Varela Robalino (1937-2019), le escribía a mi padre Don Jorge Humberto Mora Burbano (1934-1966), al conmemorar un año de su muerte.
Y no me queda más que “quitarme el sombrero”, ante la entereza y la creatividad de mi madre y las características que embellecieron a mi padre, valores con los cuales construí mi propia vida.
RECORDÁNDOTE
Grabado está tu nombre y tu recuerdo,
en nuestras, mentes y en nuestros corazones;
porque en el breve paso de tu vida,
solo amor y ternura nos brindasteis.
Hombre cabal y honrado en tu trabajo,
responsable en los actos de tu vida,
inmaculado como padre y como esposo,
bondadoso y leal con los amigos.
Tus manos y tu alma se tallaron,
en el duro trabajo cotidiano,
sin importarte el tiempo, sea frio o tibio,
porque; hacer conciencia de la conciencia fue tu sino.
Alma de hombre y corazón de niño,
sabio para inculcar el buen consejo,
tierno para amar a los que amasteis,
ardiente voz que nuestro hogar llenabais.
Quisiera desandar los tiempos idos,
y poder mirarte nuevamente,
y así calmar con tu presencia,
esta herida fatal de no tenerte.
Tulcán, 16 de Diciembre de 1.967.
Norma Varela Robalino
Publicado en el Semanario Frontera del 10 de diciembre de 1967.
