Querido Santa
24 de diciembre de 2014
Recuerdas que hace 5 años te pedí un carrito a control remoto de tres velocidades poder jugar con mis amigos; y en lugar de eso me trajiste un hermanito?
- Pues tengo algo que decirte:
Los hermanitos tardan mucho en crecer, no importa cuánta agua y tierra ponga en sus pies, siguen del mismo tamaño, con las plantas es más fácil.
Enseñarle a caminar fue más difícil de lo que imaginada, sus piernas eran muy débiles y pequeñas; y por más que me esforcé en mostrarle como se hace, el no parecía interesado en aprender.
Cuando son pequeños vienen programados en otro idioma, toma muuuuuucho tiempo que prendan español y es difícil entender que es lo que quiere (deberías pensarlo para la próxima vez!)
Mamá juega más con él que yo, el hermanito era para mí o para mamá?
Creo que tiene una avería, pues se la pasa durmiendo tooooodo el tiempo, tal vez está muy cansado pero yo necesito alguien más animado.
- ¿Por qué llora tanto?
Papá dice que al ser el mayor debo protegerlo y que él se va a convertir en mi mejor amigo, así que estoy entrenando para que nada le haga daño.
Le gusta tocar todos mis juguetes y a muchos se los mete en la boca, yo también los probé, pero la verdad no me gustan tanto como a él.
Mamá dice que pudo haber sido una niña!! Puaj!! Las niñas no me gustan!!
Tengo que explicarle toooooodo, ni siquiera sabe jugar fútbol y es un pésimo arquero!!
Por qué él no tiene que ir a la escuela?
Ni siquiera pude escoger su nombre.
Querido Santa, lo he pensado bien y creo que tener un hermanito es más difícil de lo que parece; así que hemos decidido que para el próximo año él y yo queremos un par de bicicletas!
Daniela Mora Santacruz.