El Diablo.
Cruz de piedra del cementerio de Mira
Cuentan los abuelos, que un hombre al verse tan pobre, decidió hacer un pacto con el diablo, se encontró con él en un lugar determinado y llegaron a un acuerdo:
Dentro de cierto tiempo ambos volverían al mismo lugar, pero llevando cada uno un animal diferente para que el otro le reconozca.
Regresó a su casa sufrido por haber hecho este pacto ya que si perdía la apuesta tenía que entregar su alma al Diablo. Pero si ganaba, el Diablo debía entregarle una carga de plata.