CÓMO CREER EN RELIGIONES QUE LEGITIMAN LA VIOLENCIA Y LA INJUSTICIA

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No recomendable para personas sensibles a las ideas religiosas.

¿CÓMO CREER EN RELIGIONES QUE LEGITIMAN LA VIOLENCIA Y LA INJUSTICIA?

La cerca no está en el jardín, está en la cabeza

Es asombroso el poder que tienen las creencias, entonces la cárcel más segura para el ser humano es la misma mente, cuando con un par de ideas con el membrete de “palabra de dios” aprisiona a las personas y los vuelve vulnerables para el reino del fanatismo político, camuflada con el atuendo de la “voluntad de dios”.

Es la mejor forma para legitimar desde el sentimiento religioso el atropello a las personas, la violación de sus derechos para autodeterminarse, para vivir en libertad.

 

De hecho, para mi fue impresionante haber podido mirar los desiertos más agrestes, dónde hace algunos miles de años nacieron las tres religiones más influyentes en Occidente, en el cercano y en el medio oriente, el Judaísmo, el Cristianismo y el Islamismo, nacieron en el desierto, en medio de pueblos de nómadas y tienen aún el poder de seducir a millones y millones de personas y vincularlas para que actúen de forma imperativa atadas a las ideas que alguien puso en los libros y dieron el golpe maestro al nombrarlas y propagarlas como libros sagrados.

 

La transmisión en vivo y en directo de la realidad de Afganistán, no hizo vivir de manera cercana a dos mundos juntos y separados por más de mil años, en un escenario explosivo, grotesco y mortal, a punta fusiles, bombas aviones, misiles, políticas, fanatismos y sinrazones.

A la luz de las imágenes de soldados, hombres barbados con armas de fuego y dispositivos móviles, fuego cruzado y millones de cámaras que capturaban imágenes y videos hemos podido mirar la estupidez humana a “nivel dios”.

Por un instante les pido dejar a un lado los pecados y las culpas del invasor que será motivo de otro análisis, para enfocarme en un filón que emana del absurdo de la religión al servicio de la injusticia.

¿Cómo creer en creencias religiosas y atemorizantes de la ira de dios, que legitiman la inequidad, la opresión, la violencia, la postergación, la injusticia, que viene con el membrete de “palabra de dios”? y que afecta a la sociedad y a las familias en su conjunto, pero sobre todo a las mujeres y a los niños de estos pueblos, lejanos y desconocidos.

¿Cuán difícil será para estas personas, sobre todo para las víctimas liberarse de estas ataduras mentales, para vivir en libertad?

 Los hechos históricos demuestran que las invasiones NO funcionan, que quizá la restauración de la libertad tenga que emanar de la cabeza de ellos mismos, cuando puedan comprender que: la cerca no está en el jardín, que está en sus cabezas.

Cuanto daño le hace al ser humano la utilización errada de las ideas religiosas, que en lugar de convertirse en ideas en favor del ser humano se convierten en armas de destrucción, de violencia, de dolor y de postergación.

En fin, la solución está dentro de cada ser humano, sobre todo de cada MUJER, cuando entienda que: la cerca no está en el jardín, está en la cabeza, solo entonces empezará el único camino para devolverles su dignidad y su capacidad para autodeterminarse y vivir en libertad.

 

Jorge Mora Varela

 

Imágen: Mujeres afganas con y sin velo